miércoles, 30 de abril de 2008

Crónica del III Congreso Internacional de Periodismo en la Red

El periodismo digital se ha convertido en un fénomeno real (por muy de ciencia ficción que en sus cominenzos pareciese) que ha conquistado tanto el espacio cibernético como el universitario. Por este motivo, diversos expertos del periodismo en la red se congregaron el 23 y 24 de Abril en la Facultad de Ciencias de la información de la Universidad Complutense de Madrid para arrojar un poco más de luz en el futuro del periodismo en el medio digital.
Los ponentes Sebastián Muriel, director de red.es; Francisco Estévez, profesor; Jean Fogel, director de la edición digital de Le Monde y Jesús Flores, director del congreso expusieron durante poco más de una hora los cambios de costumbres que la irrupción de Internet ha provocado en la sociedad y, por extensión, en las rutinas periodísticas. Así bien, el usuario ahora es móvil, activo (e interactivo), global y exigente. ¿ Y la información?. Ésta debe responder a los nuevos criterios de personalización, interactividad, hipertextextualidad, actualidad y acumulación. Entre información y usuario se encuentra el periodista quien debe adoptar las nuevas funciones que le dicta la red: su figura de intermediario se hace más invisble que nunca propiciando un contacto directo entre usuario y noticia. Además, el periodista se erige como guía que orienta al cibernauta en el mundo saturado de información que es la web.
Durante la charla también hubo tiempo para pronósticos y profecías. Sin embargo, en esta ocasión se respiró un clima optimista alejado del ya rancio tono apocalíptico.
Las tres rupturas del universo digital
En su participación en el simposio, Foegel destaca que las evoluciones de las relaciones entre la sociedad e internet ha sufrido a lo largo de la historia tres rupturas fundamentales. Asimismo, situó el dilema del periodismo y su papel en esta sociedad renovada dentro de la tercera ruptura. Los dos cambios precedentes están íntimamente relacionados con las evoluciones tecnológicas. El primero corresponde a la aparición de Netscape, el primer navegador de internet, que permitía acceder a la red a todo el mundo. No obstante, aún se necesitaba un guía que facilitara la navegación. En 1997 aparece Google, el primer gran motor de búsqueda de internet que empezó a ejercer como lazarillo para los ususrios. Con estas dos herramientas fundamentales ya se permitía el acceso y la navegacion de internet en todo el mundo. Los únicos problemas que quedaban por resolver eran los relacionados con la cobertura y con el aprendizaje de los usuarios. En este punto, Foegel centra la tercera ruptura. Este cambio ya no es tanto un cambio en la tecnología como en el comportamiento ya que los internautas participan de la interactividad que ofrece y no son los meros expectadores y receptores de una informacion jerarquizada al gusto de los medios.



Video que muestra el momento de la ponencia en que Jean Foegel reflexiona acerca de las tres rupturas